Al ver el título de la película pueden pensar en una actriz y cantante muy famosa actualmente que ha protagonizado recientemente una película titulada La última canción, sin embargo, el personaje que interpreta Saoirse Ronan, poco tiene que ver con el que hace Miley Cyrus, a Dios gracias.
La película trata sobre una adolescente que intenta buscar su identidad después de haber sido entrenada desde casi su nacimiento por su padre en un lugar inhóspito del polo sur para vengar la muerte de su madre. La película arranca con fuerza, manteniéndonos en vela desde el primer momento, con escenas visualmente potentes que intentan ubicarnos en una historia que se nos va destapando a medida que avanza la película.
Los mejores momentos del filme para mi gusto son el comienzo y la parte intermedia, donde la película arranca con mucha fuerza para después asentarse en algo similar a una road movie, siguiendo a Hanna en ese camino por reencontrase con su padre a medida que va descubriendo cosas de su pasado. Pero a partir de aquí el filme va naufragando en escenas de acción demasiado rocambolescas, con una Cate Blanchett en un papel demasiado plano. En definitiva, una sucesión de idas y venidas en las que la historia va perdiendo fuelle.
Aún así Hanna merece la pena, como he dicho anteriormente la película cuenta con gran parte del metraje de gran interés, con los ojos de una adolescente atípica que empieza a descubrir el mundo pese a que en muchas cosas ya lo sabe todo de él. Hubiera sido bajo mi punto de vista una mejor película si hubiera seguido el director con el desarrollo de road movie, quedando sin embargo al final un caso Bourne algo descafeinado.
NOTA: 6
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