lunes, 25 de marzo de 2013

CRÍTICA DE:


Una bala en la cabeza está basada en el comic creado por Matz y Wilson en el que un asesino a sueldo (Sylvester Stallone) tendrá que colaborar con un policía de Nueva Orleans para encontrar a los mandamases  que le tendieron una trampa. 

La película de Walter Hill (Danko calor rojo, Invicto) comienza con algo de frescura, con un personaje como Jimmy Bobo hecho a la medida de Stallone. Sin embargo este comienzo se diluye con extrema facilidad. Nada más aparecer el personaje interpretado por Sung Kwan (Taylor Kwon) la película cae en una secuencia de líneas vacías absoluta. Un guión que tiene una riqueza nula, con una unión entre policía y asesino que chirría desde el primer momento que aparecen juntos en escena. El filme parece estar creado expresamente para Stallone y lo demás poco importaba, unas frasecillas grandilocuentes al calor de una botella de bourbon y ¡¡voilá!!, ya parece que hemos cumplido nuestra dosis de testosterona a lo encefalograma plano.

Es bastante triste que la mayoría de películas que nos ofrece Hollywood de acción solo busquen el palo por el palo y que no se preocupen en absoluto por intentar cuadrar un poco la trama y los diálogos, que hacen que al final nos de igual ver hachas que lucha de almohadas. Los personajes están totalmente desdibujados, con unos capos que dan risa, un policía sin carisma y una hija que ni siquiera enseña material. Tan solo los dos antagonistas ofrecen algo al filme (Keegan vs Bobo). 

Leyendo por ahí algunos comentarios acerca de la adaptación del comic, todos coinciden en que ha sido bastante libre, quedando mucho mejor reflejado en la novela gráfica la colaboración entre policía y asesino, no resultando totalmente irreal. Además el hecho que desencadena la venganza de Bobo, no se produce en el comic hasta la mitad del mismo, algo que hubiera seguramente dotado a la película de mayor calidad viendo como transcurren los hechos a partir de ese momento.

En fin, más de lo mismo, una película de acción con un guión pésimo, que se sostiene levemente por el personaje interpretado por Stallone que en ocasiones tiene fuerza. Deberían mirar donde ponen el dinero las productoras, porque viendo filmes como Hansel y Gretel o este Bullet to the head, queda claro que la pluma está agonizando en la acción norteamericana. Echen un vistazo a Drive y luego piensen en que ponen la pasta.

NOTA: 4

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