CRÍTICA DE:

Tras un largo parón en el articulado de reflexiones en 16 mm, vuelvo con una de las pocas recomendaciones que puedo hacer de la cartelera actual, Moonrise Kingdom.

En la época estival las basuras cinematográficas se amontonan como estiércol en el coche de Biff en Regreso al futuro, sin embargo, de todo la morralla siempre algo positivo se puede sacar y en esta ocasión es la última creación de Wes Anderson, director de la maravillosa Fantástico Mr Fox o la colorida Viaje a Darjeeling. Con su peculiar forma de rodar, Anderson nos acerca una historia de amor adolescente de una forma muy original, con una banda sonora excelente y unas interpretaciones sobre todo por parte de la pequeña pareja protagonista notable. 

Si pudiéramos acercar este Moonrise Kingdom al espectador diría que está muy cerca de Fantástico señor Fox, tanto por su forma de narrar como por su estilo freak, que en determinadas ocasiones nos parece estar dando al botón de avanzar en nuestro dvd, adquiriendo los personajes un aura casi de dibujos animados. 

La banda sonora no solo es excelente individualmente con piezas como Le temps de l´amour de Françoise Hardy o la geniales piezas musicales interpretadas por la orquesta sinfónica de Londres, sino que da una gran consistencia a toda la obra y se sitúa en un puesto crucial en la importancia del filme. 

Moonrise Kingdom no gustará a todos los públicos pues es una película muy personal con una estética y una forma de narración muy sui géneris. Sin embargo es indudable que el director es original y arriesgado, poniendo en pantalla una obra muy atractiva y más aún en el momento del año en que nos encontramos. 

NOTA: 7