CRÍTICA DE:

Que el cine argentino es superior en casi todo al español no es una opinión, es un hecho. Que Ricardo Darín es uno de los mejores actores del momento a nivel mundial es una opinión personal, aunque debería ser un hecho. Que Carancho conmueve, destila acción, crítica social y unas interpretaciones impresionantes solo lo pueden comprobar si van a verla y verán que no es un hecho o una opinión es la pura verdad.

Una de las principales diferencias entre el cine argentino y el español es que el primero cuida con mimo sus guiones, construyendo sus pilares a partir de la premisa de que habitualmente un buen guión es sinónimo de buena película. Un experto en escoger guiones estos últimos años es Ricardo Darín que tras su memorable interpretación en "El secreto de sus ojos" vuelve a ponerse a las ordenes de otro director argentino (Pablo Trapero) con menos recorrido que Campanella pero similar maestría como mostró en su anterior película "Leonera" y especialmente en este "Carancho". 

La película recorre la vida de Sosa (Ricardo Darín) y Luján (Martina Gusman), de como un abogado que ha perdido su licencia se enamora de una doctora que se mantiene a flote gracias a inyecciones puntuales de droga. Pero Carancho es mucho más que eso, habla de la corrupción de una fundación ilegal que se dedica a producir accidentes para estafar a las aseguradoras al igual que a sus clientes, trama en la cual están implicados médicos, polícias, abogados y el propio Sosa, que trabaja para recuperar su licencia. Habla también de lo duro que es ser médico en una ciudad como Buenos Aires en un hospital tan dejado de la mano de Dios como sus enfermos o sus trabajadores. Habla de relaciones interpersonales y de lo dificil que es renacer en un mundo que solo te mete más abajo cada vez. 

Si todo lo que les he dicho no les ha convencido quizá lo hagan las puntuales escenas de acción maravillosas insertadas en la película que destilan tanto realismo como crudeza.

Como nota curiosa por si se lo han preguntado les diré que el carancho es un ave rapaz que vive en Argentina, aunque desgraciadamente hoy en día se puede encontrar en cualquier rincón de las sociedades que llamamos desarrolladas.

NOTA: 8

Ricardo Darín: "Como me haga la cobra quedo como carancho en las ventas"